La mayoría de las mujeres han pensado en el aumento de labios al menos una vez en su vida. Mucha gente sabe que en la práctica moderna los médicos estéticos utilizan rellenos dérmicos a base de ácido hialurónico para este procedimiento.
Si está pensando en someterse a una corrección de labios, pero teme que el efecto no le funcione, el conocido Botox puede ayudarle. El médico estético inyecta de 3 a 4 unidades del producto en el contorno de los labios, consiguiendo así levantarlos. El efecto de las inyecciones de Botox sólo dura un par de meses, por lo que si no le gusta el resultado, su uso está limitado a menos de un año.
Debe tenerse en cuenta que la corrección de los labios con toxina botulínica no es adecuada para las mujeres con una asimetría natural importante y con labios finos. En este caso, está indicada una corrección a
base de ácido hialurónico.
El bótox también ayuda a hacer frente a los signos de la edad en la zona de los labios: al actuar sobre los músculos que bajan las comisuras de los labios, se pasa de ser una mujer triste y apenada a una alegre y segura de sí misma, por lo que la vida se llenara de nuevos matices. Además, una combinación de inyecciones de Botox y ácido hialurónico puede potenciar este efecto. Como resultado, no sólo levantará las comisuras de los labios, sino que también tensará la piel que los rodea y restaurará el equilibrio hídrico.
Si le molesta una sonrisa gingival (cuando se le ven las encías al sonreír), no es necesario pedir préstamos e ir al dentista para que le pongan revestimientos. El Botox también puede ayudar con este problema.
¿Cómo? Varios músculos son responsables de la expresión de una sonrisa: los músculos elevadores (que levantan el labio superior) y los músculos depresores (que bajan el labio inferior). Cuando se inyecta Botox en los músculos elevadores, éstos se relajan, por lo que no se levantarán tanto con lo que se ocultarán las encías.